¿Qué es la garra del diablo?
La garra del diablo es una planta que crece en el desierto del Kalahari, concretamente en Sudáfrica, Namibia, Bostwana, Zambia y Angola. Esta hierba medicinal se descubrió en el pasado y desde entonces la población local la conoce por su poder terapéutico. Su nombre en latín es Harpagophytum Procumbens. Harpa, del griego Harpagos, significa "arpón". Es gracias a sus pequeños pinchos que la planta se engancha al pelaje de los animales y de esta manera puede reproducirse. Sin embargo, estas púas solo están presentes 2 meses al año, durante la estación lluviosa. Existen innumerables formas diferentes para nombrar esta planta: raíz de Windhoek, garra del diablo (Devil´s claw en inglés y Griffe du diable en francés), wood spider (araña de la madera), o incluso planta de gancho.
Sus flores tienen un color entre rojo y púrpura y una forma de trompeta. Sus propiedades medicinales se encuentran en sus raíces, que contienen diversas sustancias con propiedades analgésicas (contra el dolor), antiinflamatorias y descongestivas. Además, la garra del diablo protege el cartílago y reduce los calambres. En el sur y sureste de África, esta planta se ha utilizado desde tiempos inmemorables como analgésico y antipirético, pero también para enfermedades de la sangre, indigestión o como laxante. Además, los pueblos indígenas la utilizan para tratar problemas de vesícula biliar, hígado o riñón vesical. Esta planta nos llegó a través de las colonias alemanas en Namibia en el siglo XX. Los colonos la descubrieron en África y la estudiaron en Alemania. Se introdujo como fármaco en la década de 1950 para las personas que sufrían problemas hepáticos, vesiculares o de vejiga. Además, está indicada para la artritis y los trastornos metabólicos. Poco después, los investigadores alemanes han demostrado sus beneficios antiinflamatorios, y mientras tanto, este producto se ha hecho muy popular en el mercado alternativo en Europa.
La fitoterapia a base de garra del diablo
Esta planta se utiliza hoy en día sobre todo en fitoterapia o como hierba medicinal. La fitoterapia cura las enfermedades y sus síntomas gracias a las plantas, quienes ayudan a purificar el cuerpo. Además, las plantas estimulan el funcionamiento natural de los órganos, evitando el uso de productos químicos. Si deseas utilizar la garra del diablo por sus propiedades terapéuticas, es mejor pedir consejo a un fitoterapeuta.
¿Cuáles son los beneficios de la garra del diablo?
La garra del diablo tiene diferentes poderes terapéuticos. Puede reducir el dolor articular, prevenir la gota y estimular la digestión. Además, esta planta es útil para reducir el dolor lumbar, lo que permite reducir las dosis de analgésicos, o incluso las detiene. Sus beneficios contra el dolor lumbar han sido clínicamente probados y el cuerpo la tolera mucho mejor que los analgésicos sintéticos. La garra del diablo también es efectiva contra otros síntomas, como el dolor estomacal, las migrañas, los altos niveles de colesterol, las enfermedades de la piel u otras condiciones respiratorias.
La garra del diablo contra la artrosis
Gracias a su acción antiinflamatoria, la garra del diablo ayuda a las articulaciones y a los músculos. Por lo tanto, puede utilizarse como medicina natural contra la artrosis y la osteoporosis. La artrosis es una afección del cartílago y de las articulaciones que provoca un deterioro o incluso la desaparición del cartílago. Las articulaciones pierden entonces su flexibilidad y son menos resistentes a los golpes. La artrosis afecta principalmente a los hombros, a las caderas, al cuello, a las rodillas y a las manos. Aunque esta patología está asociada al envejecimiento, puede ocurrir a cualquier edad. La garra del diablo es una hierba medicinal posible contra la artritis. Un análisis de varios estudios realizados en pacientes con artrosis mostró que estos pacientes tenían menos efectos secundarios y que tenían que tomar menos analgésicos gracias a la garra del diablo, en comparación con un grupo de pacientes que tomaban medicamentos sintéticos y analgésicos. Por lo tanto, la garra del diablo podría, si no curar, al menos aliviar la artrosis sin necesidad de medicación. Otro estudio que duró dos meses comparó dos grupos de pacientes con artrosis: el primero con Harpagophytum y el segundo con placebo. Los pacientes que tomaron la garra del diablo experimentaron más facilidad para doblar las articulaciones que el grupo placebo.
Además, la garra del diablo es útil en caso de lesiones deportivas o tendinitis (inflamación de los tendones) relacionadas con el sobrepeso y puede aliviar el dolor lumbar. Sin embargo, ten en cuenta que es más eficaz a largo plazo y, por lo tanto, se aconseja menos para el alivio del dolor agudo.
La garra del diablo para la gota
La gota es una inflamación aguda de las articulaciones, que luego se enrojecen y se hinchan y también puede causar calor y dolor. Esta afección generalmente es causada por inflamaciones, que aparecen repentinamente y suelen desaparecer por sí mismas. La causa de esta inflamación es la cristalización del ácido úrico, que se forma sólo cuando la concentración de ácido en la sangre es demasiado alta. Desde el primer ataque de gota, el riesgo de recurrencia es alto y la patología se considera crónica a partir de 3 ataques por año. La garra del diablo también puede ser muy útil en este caso, ya que permite drenar líquidos y eliminar el ácido úrico, reduciendo el riesgo de acumulación de toxinas y eliminándolas más fácilmente. Esta planta es por lo tanto beneficiosa en caso de gota, gracias a sus propiedades antiinflamatorias y analgésicas y a su poder excretor del ácido úrico.
La garra del diablo contra el reumatismo
La garra del diablo también es beneficiosa en casos de reumatismo. El reumatismo se refiere a todas las condiciones y enfermedades que causan malformaciones y/o dolor en los huesos y las articulaciones, o en los músculos y los tendones. Todos estos son trastornos del sistema musculoesquelético, es decir, más de 200 afecciones, incluyendo la artritis, la artrosis, y la tendinitis entre otras. El reumatismo a menudo ocurre en el área de la cadera. Nuestra cadera es una articulación móvil que conecta la pelvis y la parte superior de la pierna y que nos permite mover las piernas en casi todas las direcciones. El dolor articular suele manifestarse en la rodilla, los glúteos, la ingle o la parte baja de la espalda (dolor lumbar). El dolor se siente primero al caminar, pero a la larga también aparece en reposo.
Una enfermedad reumática común de la cadera es la artritis reumatoide. Esta enfermedad autoinmune puede afectar a todo el cuerpo: las células inmunitarias atacan nuestras propias articulaciones y los tejidos que las rodean. Los síntomas empeoran con el tiempo y el daño puede llegar a ser irreversible a largo plazo.
La mayoría de los tipos de reumatismo, como la artritis reumatoide, son incurables. Sin embargo, el tratamiento adecuado puede ayudar a desacelerar la enfermedad y a limitar los síntomas. En fitoterapia, la garra del diablo es esencial en el tratamiento de las enfermedades reumáticas degenerativas crónicas. De hecho, el pueblo del desierto del Kalahari ya lo utilizaba contra el reumatismo. La garra del diablo permite drenar los líquidos y eliminar el ácido úrico, reduciendo el riesgo de acumulación de toxinas. También elimina las toxinas que se han acumulado en el cuerpo. Así es como ayuda a prevenir y a aliviar el reumatismo. Además, algunos estudios clínicos alemanes en la década de 1970 demostraron los efectos antiinflamatorios de esta planta. Por lo tanto, permite un cuidado natural contra el reumatismo. Si ya sufres esta condición, ¡no dudes en probar esta hierba medicinal!
Posología para la garra del diablo
Los medicamentos hechos a base de la garra del diablo son generalmente bien tolerados. Los extractos de esta planta pueden administrarse de diferentes maneras: en forma de gotas o de complementos alimenticios, en comprimidos o en cápsulas. Sin embargo, hay que tener en cuenta que los complementos alimenticios no pueden sustituir una dieta sana y variada. La dosis diaria recomendada por la monografía alemana de la Comisión E es de 4,5 g al día. Los efectos se pueden comenzar a sentir en las primeras 4 semanas. La monografía de la ESCOP, por otro lado, menciona de 1 a 3 gramos de plantas secas al día, o la cantidad equivalente de extracto de plantas. Luego debe administrarse durante un mínimo de 2 a 3 meses.
Té de garra del diablo
La garra del diablo también se puede utilizar como un té antiinflamatorio. Esta infusión actúa como desacidificante, ya que elimina el ácido a través de la orina, lo que es beneficioso en el caso de sufrir artrosis. Algunas personas lo llaman el té contra la artrosis. Todo lo que tienes que hacer es dejar una cucharadita de raíz seca de garra del diablo en una tetera. Luego se vierte medio litro de agua hirviendo, se deja enfriar y se deja reposar toda la noche. Por último, fíltrala y bébete 3 tazas al día. Aunque sabe un poco amarga, reduce la inflamación y por lo tanto el dolor articular causado por la artrosis.
Efectos secundarios de la garra del diablo
Los efectos secundarios de esta planta aún no se conocen bien. La diarrea es la más común. Otros efectos secundarios pueden incluir dolor de cabeza, dolor de estómago, dolor de oído, náuseas y vómitos o pérdida del apetito. Además, no se descartan reacciones alérgicas. Finalmente, la garra del diablo puede causar presión arterial alta y trastornos menstruales. En algunos casos especiales, se deben tomar precauciones al consumir esta hierba medicinal, ya que los efectos secundarios pueden ser más graves. Este es el caso, por ejemplo, de la diabetes, porque la garra del diablo puede reducir los niveles de azúcar en la sangre. También se debe prohibir en caso de embarazo y lactancia, ya que aún no se ha analizado su uso. Deben prestar especial atención las personas con problemas cardíacos o presión arterial alta, de hecho, la garra del diablo puede modificar la presión arterial y la frecuencia cardíaca. Dado que esta planta estimula la producción de bilis, deben evitarla los pacientes con cálculos biliares. Por último, también promueve la producción de ácido gástrico, por lo que no se recomienda si se padece una úlcera.
